





Escrita por el actual gobernador de Tokyo, el ultranacionalista Shintaroh Ishihara (última foto), autor de numerosas obras literarias, y dirigida por Taku Shinjo, la película relata hechos reales, basándose en las memorias de Tome Torihama, una mujer que tenía su restaurante junto a la base aérea de Chiran, en la prefectura de Kagoshima (Kagoshima-ken) , en la punta suroccidental de la isla de Kyushu, la más meridional del Japón, y de la que despegaron un total de 402 aviones suicidas en el último año del conflicto mundial. Tome, interpretada por ese bellezón que fue y sigue siendo Keiko Kishi (en la primera foto, para mí siempre será la inolvidable Eiko Tanaka de esa gran película que es 'Yakuza', dirigida por el recientemente fallecido Sydney Pollack), consuela a los jóvenes pilotos destinados a dar la vida por defender a sus seres queridos y a su país, arrasado inmisericordemente por los bombarderos estadounidenses. Como dice el personaje a lo largo del filme: "No podía detenerlos, ni tampoco animarlos, sólo rezaba por la tranquilidad de sus almas..." Ella fue una auténtica madre adoptiva para los imberbes aviadores, que incluso le entregaban cartas de despedida para sus familiares, desafiando las prohibiciones en ese sentido de la Policía Militar. Es impresionante ver a la auténtica Tome en este maravilloso trailer (pinchad aquí) de la película, acompañada por la emocionante y nostálgica música de Naoki Sato y que incluye las fotos de los pilotos que ella conoció antes de morir ante los cañones y cazas de la flota aliada (me pone la piel de gallina cuando sale el auténtico dueño del perrito, con él en brazos), y filmaciones de ataques kamikazes reales.
La película recrea con un gran realismo las aterradoras escenas que vivían en sus cabinas los jóvenes pilotos en el momento de su último vuelo. Sobrecargados con un depósito de combustible adicional y una bomba de 250 kg bajo sus alas (pinchad en la foto 2), los Hayabusa, armados sólo con dos ametralladoras en el morro y muy poco ágiles de pilotar en esas condiciones, volaban a unos 250 km/h más lentos que los veloces cazas Grumman F6-F Hellcat que los cazaban "como pavos" (en expresión de los mismos pilotos yankees) con sus seis ametralladoras pesadas mientras los valientes se dirigían en línea recta a su objetivo sin poder desprenderse de su carga, lo que habría dejado sin efecto su ataque. La masacre que supone el clímax de todo el filme constituye asimismo la escena de combate aéreo más impactante de la historia del cine, para este humilde aficionado a la aeronáutica militar, y el objeto último de este post (pinchad aquí).
'Ore wa, kimi no tame ni koso shini ni iku' fue todo un éxito desde que se estrenó en Japón el 12 de mayo de 2007. La 'premiere', como demuestran las fotos de Getty Images, contó con varios actores vestidos con el uniforme de vuelo de los pilotos suicidas de la Aviación del Ejército Imperial, en honor a los héroes caídos. No queda sino preguntarse cuándo podremos los moradores de este país, tan poco respetuoso con el cine de calidad procedente de Oriente, disfrutar en una pantalla grande con el vuelo de los gráciles Ki-43, los potentes Hellcat o los estilizados Kawasaki Ki-61 Hien increíblemente recreados por ordenador. Aquí tenéis otros dos estupendos trailers subtitulados en inglés para quitarnos un poco las ganas hasta entonces: TRAILER1 y TRAILER2
Este post está dedicado a todos los pilotos que, desde que alzara el vuelo el primer avión, dieron la vida en defensa de su patria y de sus seres queridos, sin distinción de país, raza, ideología o religión. Valientes que hicieron de ese sueño que algún día albergaron de poder surcar libremente los cielos el instrumento último con el que ofrecer su máximo sacrificio. Descansen en paz los héroes, allí donde se encuentren