jueves, 20 de abril de 2017

Drinkwater... o sea, bebe Cerveza Floja...


Uno de los futbolistas revelación del pasado año fue Danny Drinkwater, el exitoso centrocampista del modesto Leicester City, sorprendente campeón de la Premier League inglesa la pasada temporada. Un apellido que tiene un origen de lo más curioso y que se encuentra entre los más antiguos de Inglaterra, por haberse originado en plena época de esplendor sajona, allá por el siglo VI.
En la Edad Media, la llamada "cerveza floja", debido a su baja graduación, era la bebida universal entre las clases más pobres y tan barata como el agua, e incluso más sana que ésta, ya que el alcohol prevenía las habituales infecciones de pozos y manantiales, contaminados por las aguas fecales que se filtraban hasta los acuíferos desde los asentamientos humanos y ganaderos, lo que hacía de estas aguas una bebida dudosamente potable. 

La 'cerveza floja' o ligera (light ale) era además bastante más nutritiva que el agua, debido a sus azúcares de origen vegetal, y era también la bebida habitual del desayuno y la comida de los niños, con los efectos que uno se puede imaginar. Se calcula que una persona podía llegar a beber en tiempos medievales hasta seis litros de cerveza floja. Pan y cerveza floja eran los alimentos básicos de la población en ese período. 
Se cree que el apellido Drinkwater (en inglés antiguo, DricanWoetre) puede haberse originado como un apelativo irónico para ciertos posaderos que aguaban la cerveza normal o para algunos bebedores notorios que tragaban litros y litros de ésta como si fuera agua... o se ponían hasta arriba de la variante más floja. 

El apellido como tal se remonta a finales del siglo XIII en el que se instituyó el Poll Tax o impuesto de capitación. Un impuesto igual para todos los campesinos, que debían pagarlo por el mero hecho de ocupar una tierra, y que servía a la Corona y los señores para calcular cuánto dinero podían recaudar de cada territorio concreto.
Ya en 1274, consta como registrado un tal John Drinkewater entre quienes pagaron ese impuesto de origen romano, reinstaurado por las autoridades británicas a finales del siglo XIII. Las variaciones en la ortografía de este apellido incluyen también a los Drynkwater, Drynekewatter y Drinkewater.

¡SALUD!


2 comentarios:

Conde de Salisbury dijo...

Evocador post que me trae muchas cosas a la cabeza: 1) A los residuos de excrementos humanos y animales habría que sumar los de las curtidurías, que si bien también empleaban masivamente orina y estiércol generaban vertidos incluso peores. Así que para beber mejor vino, cerveza o sidra (según ecosuistemas regionales). 2) Cuando yo era pequeño todavía se acostumbraba a dar a los chavales vino con agua, ya con gaseosa en los hogares más chic. 3) Lo de aguar la cerveza me recuerda a su equivalente el vino "bautizado", expresión que siempre me ha parecido feliz. 4) Una pequeña precisión, creo que el primer poll tax sería de 1377, por tanto del XIV, las encuestas de 1274 creo que corresponden más bien a los "Hundred Rolls".

sushi de anguila dijo...

En lo del Poll Tax, técnicamente, es cierto que hasta 1377 no se impone el impuesto con ese nombre, aunque muchos autores aplican la misma denominación al censo de propietarios instaurado entre 1274-1275, y a los impuestos cobrados a partir de entonces, que afectaban especialmente a las materias primas, como la lana o los cereales con los que se elaboraban las bebidas alcohólicas... Como no podía ser de otra manera, este oneroso censo sacacuartos que desde entonces permitió asfixiar tributariamente a los ingleses fue una de las primeras medidas adoptadas tras su coronación por Eduardo I 'Piernas Largas', el rey malo malísimo de 'Braveheart'...